¿Quién no ha sentido un bajón de energía a media mañana o por la tarde cuando aún falta bastante para la cena? En esos momentos, los snacks pueden convertirse en nuestros mejores aliados: nos dan el empujón que necesitamos para seguir adelante y mantienen a raya el hambre. Sin embargo, es fundamental elegir snacks saludables que no aporten demasiadas calorías vacías.
El arte del picoteo: ¿cómo escoger snacks nutritivos?
Con tantas opciones de alimentos y una miríada de tendencias alimentarias, escoger una dieta saludable puede convertirse en un auténtico desafío. Por ese motivo, no es extraño que nos enfoquemos en la planificación de las comidas y nos olvidemos de lo que picamos, de manera que esos pequeños snacks pueden acabar saboteando nuestros esfuerzos sin darnos cuenta. ¿La solución? Elegirlos conscientemente.
- Fíjate en las etiquetas
Las etiquetas son como tu mapa del tesoro. Por tanto, acostúmbrate a leerlas. Tus refrigerios deben tener pocos ingredientes (no más de cinco o siete) y que sean de buena calidad. Prioriza ingredientes nutritivos como los frutos secos y las semillas, que te aportan proteínas y grasas saludables. En cambio, evita los aditivos, colorantes y las grasas trans. Y, por supuesto, que no contengan azúcar añadida ni edulcorantes artificiales como sucralosa, Stevia, fructosa, jarabe de maíz, aspartamo, maltodextrina y un largo etcétera.
2. Que lo natural sea tu primera opción
Si eliges snacks saludables caseros, no tendrás que preocuparte por descifrar la lista infinita de ingredientes de las etiquetas. Mejor busca algo más simple. En las frutas, verduras o frutos secos… lo que ves es lo que hay. Cuanto menos procesado sea el producto, mejor para tu salud. También hay muchas recetas de snacks saludables que puedes preparar para toda la semana, desde galletas de avena y barritas de frutos secos hechas en casa hasta crackers integrales con semillas o chips de frutas y verduras.
3. El tamaño importa
Un refrigerio no es una comida completa, aunque a veces cueste contenerse. Si te comes un paquete entero de frutos secos, dejará de ser un snack saludable. La clave está en las porciones: un puñado de nueces o un tazón pequeño de palomitas es suficiente para aguantar hasta la próxima comida. Un truco para no comer de más consiste en elegir formatos pequeños listos para el consumo, como las barritas de cereales, o dosificar de antemano las porciones de los snacks saludables caseros que lleves al trabajo. Si planificas con antelación y los tienes a mano en tu despensa o al salir de casa, evitarás recurrir a opciones menos saludables o pasarte con las cantidades.
4. Piensa más allá de las calorías
Por supuesto, no pasarte con las calorías es importante, pero no es lo único en lo que debes fijarte para elegir un snack saludable. ¿De qué sirve un snack de 100 calorías si está repleto de azúcar e hidratos de carbono refinados que te dejan con hambre? En vez de eso, apuesta por alternativas con un mayor poder saciante, lo que significa que deben ser ricas en fibra, vitaminas y proteínas. Un puñado de almendras o una manzana te llenarán mucho más que un producto ultra procesado “bajo en calorías”. Y te sentirás mucho mejor ya que evitarás el bajón de azúcar posterior.
5. La variedad es clave
Cuando se trata de snacks saludables, la monotonía puede convertirse en tu enemigo. El secreto consiste en divertirte mezclando y combinando recetas de snacks saludables. Un día podrías disfrutar de una crujiente mezcla de frutos secos y frutas deshidratadas y al siguiente de unos palitos de zanahoria con hummus o quizá de un yogur griego con semillas de chía. Así no solo evitarás aburrirte de comer siempre lo mismo, sino que podrás llevar una alimentación más equilibrada y obtener una mayor variedad de nutrientes.
Para evitar la tentación, recuerda que lo que comes no solo afecta tu cuerpo, sino también tu mente y nivel de energía. Esos pequeños momentos de picoteo pueden convertirse en una oportunidad para alimentarte de manera más inteligente, así que selecciona snacks saludables que te ayuden a controlar el hambre entre comidas y te aporten los nutrientes que necesitas para seguir en movimiento y mantenerte en forma.